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La denominación corazón pulmonar
crónico se utiliza para designar a toda enfermedad cardíaca
ocacionada por hipertensión pulmonar primaria o secundaria.
La secuencia de eventos que culmina en el corazón pulmonar
crónico comienza con el desarrollo de hipertensión
pulmonar, que determina sobrecarga del ventrículo derecho
(VD) y conduce a su dilatación e hipertrofia. Posteriormente
el VD se hace insuficiente, aumenta su presión diastólica,
se sobrecarga la aurícula derecha y se produce hipertensión
venosa sistémica.
MANIFESTACIONES CLINICAS
El examen cardíaco revela signos de hipertensión
pulmonar, como aumento del componente pulmonar del segundo ruido
y latido impulsivo del VD en la zona paraesternal derecha o en
epigastrio, por hipertrofia del VD, que puede ser muy difícil
de detectar en casos de enfisema. La aparición de un tercer
ruido derecho indica insuficiencia ventricular y la insuficiencia
tricuspídea por dilatación del VD se traduce por
un soplo sistólico de regurgitación y aumento de
la onda y pulso venoso. Además, hay ingurgitación
yugular, hepatomegalia, reflujo hepatoyugular y edema. La disminución
del gasto cardíaco se traduce por fatigabilidad, compromiso
del estado general, baja de peso, anorexia, etc.
MANIFESTACIONES RADIOGRAFICAS
Son escasas, ya que frecuentemente la silueta cardíaca
no aumenta notoriamente de tamaño. El crecimiento de VD es
algo más aparente en la proyección lateral, con disminución
del espacio aéreo situado entre corazón y esternón.
ELECTROCARDIOGRAMA
Aunque los signos electrocardiográficos
de corazón pulmonar son característicos, pueden estar
ausentes incluso en casos avanzados. Ellos incluyen R/S >1 en V5
y V6; S > R en V1; bloqueos de rama derecha; P > 2mm en D2 (P pulmonar)
y desviación a la derecha del eje eléctrico.
TRATAMIENTO
El cor pulmonale puede ser el resultado de cualquiera
de las causas de hipertensión pulmonar vistas en el capítulo
anterior. El tratamiento básico exige, por lo tanto, la corrección
o atenuación de la enfermedad causal. Siendo la EPOC la causa
más frecuente de hipertensión pulmonar crónica,
el manejo generalmente incluye la corrección de la hipoxemia,
hipercapnia y acidosis. Los diuréticos son útiles
al disminuir la precarga del VD, pero deben administrarse con cautela
porque pueden disminuir la volemia y así acentuar la disminución
del gasto cardíaco. Los digitálicos son poco útiles
y significan un gran riesgo por su toxicidad, que aumenta en estos
enfermos por la hipoxemia, por lo que sólo son utilizados
con cautela cuando existe compromiso ventricular izquierdo asociado
o arritmias. |
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